El conflicto entre el sector y la conselleria por las pérdidas del servicio nocturno obliga a los vecinos de Vallada a desplazarse a Canals

FUENTE: Levante

La ley permite a las farmacias de una misma zona repartirse las guardias con una condición:  que no se incremente en más de 15 minutos el tiempo que tardaría el usuario en llegar en coche hasta el punto más cercano para acceder a la medicación de urgencia que necesita. El Ayuntamiento de Vallada ha advertido de que esta normati-va podría estar incumpliéndose en su término. Desde hace semanas, el recorte del servicio nocturno en el área farmacéutica que compar-ten  las  dos boticas de Moixent y la de Vallada obliga a los vecinos de esta última población a desplazarse hasta Canals «la mayoría de días», según el consistorio. El recorrido supera el cuarto de hora.

Esta situación de agravio ha puesto en pie de guerra a la corporación valladina, que ha iniciado una campaña de recogida de firmas para reclamar el restablecimiento del horario habitual, modificado sin aviso previo. A preguntas de Levante-EMV, la Conselleria de Sanidad asegura que está «recabando información» sobre la problemática. El departamento autonómico  subraya que ya se ha puesto en contacto con el Colegio de Farmacéuticos, como entidad responsable de la elaboración de los turnos de farmacias de guardia, para «comprobar los cambios que se han producido y cómo pueden afectar a los usuarios». Este diario también contactó ayer con el Colegio para conocer las razones de la reordenación, pero al cierre de esta edición no había obtenido respuesta.


Otras fuentes consultadas vinculan la reducción del servicio a una fórmula de presión de los farmacéuticos para que la conselleria ome conciencia de las pérdidas que están asumiendo como consecuencia de la falta de rentabilidad del servicio nocturno. El sector denuncia que si la administración quiere mantener las guardias en los pueblos donde son deficitarias, ha de garantizar compensaciones económicas adecuadas.


«La gente se queda desprotegida» La alcaldesa de Vallada, Mª José Tortosa, censura que sus vecinos tengan que pagar los platos rotos del conflicto y urge a que se restablezca el horario nocturno. «No entendemos ni compartimos la decisión y nos hemos cansado ya: la gente no se puede quedar des-protegida por la noche», proclama. Tortosa ha mantenido contactos con los actores implicados y ha trasladado las quejas, pero de momento no ve solución. Por eso, el consistorio ha pasado a la acción.


La reordenación de las guardias afecta sobre todo a los vecinos de Vallada, pero también a los de Moixent y la Font, donde el servicio se ha visto mermado en menor medida. Los alcaldes de estos municipios van a sumarse a la recogida de firmas y comparten la protesta. Ni Moixent ni Vallada abren de noche los fines de semana. Los pacientes de Vallada que van a urgencias al centro de salud de Moixent son derivados a alguna de las 5 farmacias de Canals.Otra alter-nativa es la Font, a 23 kilómetros.

Farmacias abiertas y de urgencia más cercanas