Las dos sedes colegiales de Valencia y Paterna disponen de un desfibrilador para asistir a alguien en los primeros minutos de una parada cardíaca

La muerte súbita es un problema de primera magnitud que al año se cobra la vida de miles de personas en todo el mundo. La existencia de desfibriladores semiautomáticos para personal no sanitario en lugares públicos, así como la formación en las técnicas básicas de recuperación cardiopulmonar, conseguirían salvar un elevado porcentaje de las personas que sufren un paro cardíaco.

Por ello, el Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia ha querido sumarse al Proyecto SalvaVidas con la adquisición de dos desfibriladores externos semiatomáticos. El Proyecto Salvavidas es una iniciativa social que pretende concienciar a los no sanitarios de la importancia de tener una vida más saludable, de la necesidad de aprender técnicas de reanimación y primeros auxilios, así como lograr una mayor implantación de desfibriladores semiautomáticos.

En este sentido, tanto la sede de Valencia como la de Paterna disponen ya de todo lo necesario para asistir a cualquier persona en caso de sufrir una parada cardíaca, teniendo en cuenta que la asistencia debe llegar en los primeros 4 minutos de producirse la parada.

Para garantizar la seguridad de los colegiados y trabajadores del MICOF, y aunque la normativa no lo requiere al tratarse de un equipo de fácil manejo, se ha decidido formar a varios compañeros de Valencia y de la sede de Paterna en el uso y manejo de estos aparatos. Además, todos aquellos trabajadores que lo deseen tienen a su disposición una plataforma online en la que aprender, de forma clara y sencilla, todo sobre el correcto uso del dispositivo.

El Colegio, gracias a medidas como esta, ha sido certificado como Espacio cardioprotegido por la Sociedad Española de Medicina (SEMST) por llevar un correcto mantenimiento de los equipos y tener la correcta instalación de estos.

Farmacias abiertas y de urgencia más cercanas