Montón aseguró al Consistorio que lo daba por finalizado tras confirmar que no hay rastro de la bacteria en la red de abastecimiento

FUENTE: Las Provincias

Hasta cinco veces repitió la consellera de Sanidad, Carmen Montón, durante una reunión que el brote había acabado. Era la primera vez que la conselleria se reunía con el Ayuntamiento y la empresa tras más de quince días desde que se declarará el brote por legionela en Chiva. Ayer por la mañana, en un acto y ante los medios de comunicación, Montón decía lo contrario.

En la reunión del miércoles por la tarde la Consellera quiso trasmitir al Ayuntamiento que, tras las medidas de cloración, las analíticas confirmaban que el agua estaba limpia y ante la preocupación de las autoridades municipales, repitió que el brote había finalizado, según confirmaron varios asistentes al citado encuentro. Esta afirmación centró el resto de la reunión en las responsabilidades de lo ocurrido. El Ayuntamiento insiste en que pedirá las debidas explicaciones a la UTE, ya que pudieron comprobar que, en las pruebas realizadas tras el aviso de Sanidad, el día 3 de agosto, los niveles de cloro estaban a cero.

Pero las mismas fuentes municipales insisten en que su mayor preocupación son los vecinos, ya que después de las declaraciones que Montón daba en su visista al Centro de Transfusiones quedan «desacreditados de cara a los residentes de las urbanizaciones de Calicanto».

Desde que se hiciera público el brote, el Ayuntamiento ha pedido a Sanidad más información de lo que estaba ocurriendo, incluso han explicado en varias ocasiones como se enteraron a través de la prensa del fallecimiento de uno de los afectados. Asimismo, aseguran que Sanidad no les permitió informar a los vecinos de lo que estaba sucediendo, «ni siquiera después de haber sido decretado el brote». La consellera de Sanidad hizo hincapié en aclarar que su responsabilidad era la de trasladar las indicaciones necesarias al Ayuntamiento, pero informar a los vecinos era obligación municipal y de igual modo responsabilizó al Ayuntamiento de no haber controlado la actuación de la empresa.

Lo cierto es que después de haber sido decretado el brote, y tras el fallecimiento de uno de los vecinos de la urbanización, la autoridad autonómica, más de tres semanas después, no ha realizado ninguna declaración pública al respecto, incluso cuando los vecinos pedian información y un mensaje de tranquilidad. Ayer Carmen Montón hablaba por primera vez sobre lo ocurrido, asegurando que el brote aún no estaba cerrado.

Por otro lado, la consellera aseguró ayer que todavía no se pude relacionar el fallecido por legionela en Torrent con el brote de Calicanto, porque «hay que cuadrar fechas y otras consideraciones para poder afirmar que este caso tiene relación con el resto de los afectados».

Desde Sanidad insisten en que los técnicos de Salud Pública desconocen todavía cuál pudo ser el foco de contagio, ya que trabajaba en un camión frigorífico con instalaciones que son consideradas como de riesgo de transmitir la bacteria y desconocen si estuvo en la zona afectada.

Farmacias abiertas y de urgencia más cercanas