Continuamos nuestro recorrido por las reacciones adversas oculares a medicamentos (RAM) que empezamos en el artículo del blog dedicado a medicamentos del tracto alimentario y metabolismo, esta vez centrándonos en los medicamentos con indicación de antiinfecciosos (antibióticos, antivirales, antimicóticos) y antiparasitarios.

La RAM más común producida por estos fármacos es la visión borrosa o la pérdida de agudeza visual, en la que la persona resulta incapaz de distinguir con nitidez los detalles que se observan.

Los principios activos que pueden producir visión borrosa son:

• Antibióticos quinolonas (ácido pipemidico, ciprofloxacino, moxifloxacino y ofloxacino), tetraciclinas (minociclina y tetraciclina) y macrólidos (azitromicina de administración oftálmica y roxitromicina)
• Antiviral para el tratamiento de la VHC (ribavirina)
• Tratamientos para la tuberculosis (rifampicina y etambutol)
• Antimicóticos (itraconazol)
• Antipalúdicos (hidroxicloroquina)
• Agente dopaminérgicos (amantadina)

Es importante recalcar este último, la amantadina, que, aunque está clasificado como un agente dopaminérgico y tiene indicación para el tratamiento de la enfermedad de Parkinson, también se administra para tratar los síntomas característicos y profilaxis del virus de la gripe A (Influenza A).

Otra RAM muy común es la irritación ocular-en la que los ojos lagrimean y se enrojecen-. Aquí podemos encontrar antibióticos del grupo de las quinolonas (ácido pipemidico, ciprofloxacino y moxifloxacino de administración oftálmica, así como ofloxacino y norfloxacino en cualquier tipo de administración), los aminoglucósidos (tobramicina de administración oftálmica) y macrólidos (azitromicina de administración oftálmica); cloranfenicol de administración oftálmica o el ganciclovir de administración oftálmica.

Tras el uso de algunos medicamentos de estos grupos también es posible que se observen casos de diplopía o visión doble, en la que se perciben dos imágenes de un mismo objeto. Esta RAM puede surgir en antibióticos pertenecientes al grupo de las quinolonas (ácido pipemidico, ciprofloxacino y moxifloxacino), imidazoles (metronidazol) o monobactámicos (aztreonam). De igual modo, puede aparecer por la administración de hidroxicloroquina (antipalúdico), itraconazol (antimicótico sistémico) o rifampicina (antituberculoso).

Otra RAM habitual son los trastornos oculares, siendo los más comunes miopía, hipermetropía, astigmatismo. Encontramos cuatro principios activos utilizados para diferentes indicaciones que presentan esta RAM: cefuroxima (antibiótico), cloroquina (antipalúdico), isoniazida (tratamiento para la tuberculosis) y la amantadina.

Una RAM que nos puede pasar desapercibida es el lagrimeo, que en ocasiones llega a ser excesivo. Entre los principios activos implicados encontramos el cloranfenicol de administración oftálmica, oseltamivir (antiviral) y tres antibióticos comunes, dos de ellos quinolonas (ofloxacino de administración oftálmica y norfloxacino) y un aminoglucósido (tobramicina de administración oftálmica).

También el dolor ocular es una RAM, puede estar asociado al uso de antibióticos del grupo de las cefalosporinas (cefditoreno) y de las quinolonas (moxifloxacino de administración oftálmica), por estar en tratamiento antituberculoso (etambutol) o por el uso de antivirales (oseltamivir y ribavirina).

Una de las RAM más infrecuentes, pero fácilmente identificables es el nistagmo, afección en la que los ojos se mueven de forma rápida e incontrolada pudiendo ser de lado a lado, de arriba hacia abajo y de forma circular. Puede aparecer relacionado con el uso de tres antibióticos pertenecientes al grupo de las quinolonas (ácido pipemidico y norfloxacino) o derivados del nitrofurano (nitrofurantoina).

La conjuntivitis, una afección frecuente y tratable del ojo caracterizada por la inflamación de la conjuntiva, en el que la persona presenta enrojecimiento de los ojos. Generalmente se debe a la presencia de virus, bacterias, alérgenos o sustancias irritantes, y por supuesto también a medicamentos. Puede aparecer como RAM en el uso de principios activos del grupo de las quinolonas (moxifloxacino de administración oftálmica), de antivirales tanto para el tratamiento de la virus de la hepatitis C (VHC) (ribavirina) o en inhibidores de la neuraminidasa (oseltamivir).

Además de la visión borrosa o doble, también existen medicamentos que pueden generar otras alteraciones visuales (problemas con la visión de colores, midriasis, etc.…) consideradas como RAM. Son bastante frecuentes en pacientes con antibióticos pautados, especialmente en los siguientes grupos: cefalosporina (cefditoreno), quinolonas (moxifloxacino de administración oftálmica y ofloxacino tanto de administración oftálmica como sistémica), macrólidos (roxitromicina), tetraciclinas y fosfomicina.

Una RAM que resulta especialmente interesante en el grupo de las quinolonas de administración oftálmica (ofloxacino y moxifloxacino), es la fotofobia. Esta es una reacción anormal a la luz de baja o media intensidad que provoca un dolor intenso en el paciente lo que no le permite llevar una vida normal sin protección como unas gafas de sol (incluso en espacios cerrados).

Asimismo, el ofloxacino y un antibióticoaminoglucósido (tobramicina) de administración oftálmica puede dar como RAM, la xeroftalmia o sequedad ocular, uno de los trastornos más comunes del ojo y que provoca más molestias a los pacientes.

Es frecuente también la aparición del edema palpebral como una RAM por el uso de estos antibióticos de administración oftálmica como puede ser el ciprofloxacino, el moxifloxacino, el norfloxacino y la tobramicina. También se ha descrito este edema palpebral en la administración de famciclovir.

Una de las RAM más preocupante para el paciente es la pérdida de visión que es la disminución de la agudeza visual. A diferencia de la ceguera, las personas son capaces de seguir realizando las actividades diarias. Es poco frecuente, pero la cloroquina y el metronidazol, pueden ser causantes de esta merma en la visión.

También es poco frecuente la aparición de queratitis ocular. Cuando esta RAM aparece, la persona experimenta unas serie de síntomas como hiperemia ciliar (enrojecimiento alrededor de la córnea), disminución de la agudeza visual, exceso en la producción de lágrimas, fotofobia (sensibilidad a la luz), sensación de picazón o arena en los ojos. Tan solo el moxifloxacino y el antiviral ganciclovir, ambos de administración oftálmica son los medicamentos que provocan esta RAM. Aunque resulta difícil asociar esta RAM al ganciclovir ya que precisamente está indicado para el tratamiento de la queratitis superficial aguda causada por el virus Herpes simplex.

Este blog pertenece a una serie de blogs sobre RAM oculares. Puedes consultar el primer artículo “Reacciones adversas oculares a medicamentos del tracto alimentario y metabolismo”, el siguiente blog será: “Reacciones Oculares Adversas de los AINES”.

FUENTES:

Cartel de Reacciones Adversas Oculares de los Antiinfecciosos y Antiparasitarios. Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (MICOF).