Varios profesionales explican cómo ha cambiado el papel de este profesional.

FUENTE: Redacción médica

Este miércoles 25 de septiembre se celebra el Día Mundial del Farmacéutico bajo el lema 'Medicamentos seguros y eficaces para todos'. Una profesión que ha evolucionado a lo largo de los años para adaptarse a una sociedad cada vez más digitalizada.

A pesar de seguir siendo la profesión sanitaria más cercana al paciente, las nuevas tecnologías se han cruzado en su camino. Así lo explica Ricardo Folgado, un farmacéutico veterano que ha vivido una gran transformación en la profesión. "Ahora luchamos contra la información que los pacientes encuentran en internet y que, en la mayoría de ocasiones, no es del todo fiable".

Para Folgado, ha habido un cambio en la forma de ver a la figura del farmacéutico. "Los pacientes encuentran los prospectos de los medicamentos en internet, pero estos están adornados de parafernalia que no se adapta al cien por cien a la realidad". En este sentido, este farmacéutico aboga por enseñar a los pacientes a "buscar en fuentes fidedignas y animarles a preguntar a los profesionales".

Una visión que también comparte Cristina Ridaura, una profesional que lleva un año trabajando en una oficina de farmacia: "Los jóvenes nos hemos incorporado al mercado laboral en un momento de nuevos avances tecnológicos, siendo uno de los más importantes la receta electrónica".

Para Ridaura, "internet está siendo un inconveniente porque la gente joven llega a la farmacia con una base prestablecida que no es fiable" y le preocupa que estos pacientes "se fían mucho de la información que encuentran en internet".

También Gonzalo Miguel Adsuar, presidente de la Federación Española de Estudiantes y farmacéutico comunitario, señala que "tenemos la gran tarea de adaptarnos a la digitalización, el big data, la automatización de procesos un mundo más globalizado y competitivo en el que cada vez se tiene un mayor acceso a la información por parte de los pacientes, pero no siempre a la información correcta y veraz".

En este sentido, Adsuar incide en que "es responsabilidad del farmacéutico saber adaptarse a estas nuevas realidades y demostrar su valía en un horizonte de cambios muy próximos". Añade, además, que "es indudable que el farmacéutico es el responsable y garante del medicamento, pero a veces se le contempla únicamente como un perfil técnico y se corre el riesgo de que la profesión pierda su potencial y su vocación asistencial".

Mejoras

"Poner en valor la figura y formación del farmacéutico". Esta es una de las premisas que expone Ridaura y para lo que propone "motivar la información veraz a través de redes fiables como las páginas o redes sociales de los Colegios Oficiales de Farmacéuticos".

El objetivo es "ganarnos a la gente joven a través de servicios profesionales farmacéuticos que pongan en alza nuestra formación".

Por su parte, Folgado propone "concienciar a la sociedad a través de las redes sociales". Uno de los ejemplos son las infografías que publica el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia, "que ayudan al paciente a conocer las patologías y cómo deben tratarse".

También el presidente de la Federación propone mejoras en cuanto al papel del farmacéutico que pasan por "crear un cauce de comunicación directo y reglado con los médicos, o al menos capacidad para ver la historia clínica de los pacientes, a través de receta electrónica. Tenemos una gran asignatura pendiente con la colaboración interprofesional entre diferentes profesionales de la salud".

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